Baking, Cook’s Library (Parragon Publishing) es un libro que compré en Michael’s casi por casualidad hace unos años. Costaba $5, así que sin hojearlo mucho y con un espíritu de «ta’barato, dame dos» lo agarré y me llevé una sorpresa cuando lo detallé con calma en la casa. Una de sus tantas recetas facilísimas y rápidas, probadas y comprobadas, es la de este banana loaf que les paso ahora. Si le inventan alguna variación, escriban y cuenten qué tal.
INGREDIENTES
1/3 taza mantequilla, cortada en cubitos + extra para engrasar
1½ taza (generosa) de harina leudante
1/3 taza azúcar caster/superfine (o más, si no le tienes miedo a la diabetes)
2/3 taza dátiles sin semilla y cortados, o pasas, o nueces (opcional)
2 cambures / bananas / bananos / plátanos / guineos, machacados con tenedor (en realidad, se puede machacar con lo que sea, pero el pan queda más rico si de vez en cuando te encuentras trocitos de cambur)
2 huevos, ligeramente batidos
2-3 cdas miel
- Engrasar un molde para pan de 900 g / 2 libras (o cualquier molde rectangular) y ponerle en el fondo papel parafinado (=de cera, para hornear, baking parchment).
- Cernir la harina en un recipiente grande. Agregar la mantequilla y disolverla con la punta de los dedos hasta conseguir la consistencia de migas de pan. Una alternativa más sencilla: echar mantequilla y harina en una licuadora o procesador y darle toques hasta que no queden pedazos grandes de mantequilla.
- Añadir azúcar, huevos batidos, miel, cambur machacado y extras (pasas, dátiles, nueces, frutas secas…). Mezclar bien hasta formar una pasta suave (en inglés le dicen a esto dropping consistency, espesa pero todavía líquida).
- Verter la mezcla en el molde preparado, distribuyéndola bien y emparejando la superficie con una espátula o cuchillo.
- Hornear a 325ºF/160ºC (horno precalentado), por una hora o hasta que esté dorado y al insertarle un palillo o la punta de un cuchillo, salga limpio.
- Dejar enfriar un poco antes de desmoldar y pasarlo a una rejilla para enfriar por completo (si se corta muy caliente, se desmorona).
NOTAS Y VARIACIONES
- No es un pan muy dulce de por sí. En EE.UU. y en Europa, el azúcar no endulza demasiado, así que se le puede poner un poco más (o más miel). Por supuesto, mientras más maduro el cambur, mejor.
- Sobre el azúcar, usualmente las recetas de postres piden que sea muy fina, para que luego no se sienta granulosa la masa. En inglés, se llama caster o superfine sugar, pero no sé cómo se le diga en los diferentes dialectos del español (creo que en España le dicen «azúcar de flor»). Por lo general, la distinción es «azúcar refinado» vs. «azúcar granulado».
- Sobre la temperatura, mi horno es de convección y usualmente bastan 45 minutos, pero hay que ir chequeando.
- Este pan es versátil y aguanta un montón de modificaciones. Por ejemplo:
a) Se le puede espolvorear azúcar morena por encima antes de hornear. Esto le forma una costra crujiente buenísima.
b) Una vez le puse arándanos secos (cranberries) y quedó riquísimo.
c) Se puede reservar un poco de mezcla (tal vez 1/4) y agregarle una cucharada o dos de cacao en polvo (si se pone muy seca, yo suelo echarle un chorrito de leche hasta que quede como antes). Aquí uno se puede poner creativo:
- Se esparce la mitad de la mezcla sin chocolate en el molde, luego la achocolatada y finalmente el resto de la otra, para que quede en capas.
- Se puede marmolear, echando primero la blanca y por encima la marrón, y luego haciendo movimientos en zigzag con un palillo o cuchillo.
- Se puede hacer sólo un centro de chocolate, como en la foto de abajo, echando la parte blanca primero, y luego haciendo una línea gruesa de choco en el centro. Empujar hasta el fondo con una espátula, como si se estuviera cortando la mezcla longitudinalmente. Lo que tiene arriba son unas pacanas para decorar (en la primera foto, nueces, y en la segunda, almendras y azúcar morena).