Yo nunca había comido el calabacín crudo hasta que Comida libanesa (un librito de esa colección de Anne Wilson que venden en todas partes) cayó en mis manos y vi esta receta. Es refrescante, perfecta para el verano. Aun si no son muy amigos de la berenjena y el calabacín, les recomiendo que prueben la ensalada. Se van a llevar una sorpresa.
En este link hago una aclaratoria sobre el calabacín (calabacita, zapallito, zucchini), en especial para los gastrolectores venezolanos.
INGREDIENTES
Para 6 personas
3 calabacines pequeños
2 berenjenas pequeñas
1/4 taza de cilantro fresco, picadito
3 cucharadas de aceite de oliva extra virgen
2 cucharadas de jugo de naranja
2 cucharadas de jugo de limón
Sal y pimienta negra, al gusto
- Cortar la berenjena longitudinalmente en dos (si es muy gruesa), y luego rebanar fina. Poner sobre un colador y echar bastante sal. Dejar llorar por unos 30-45 minutos. Esto hace que bote el exceso de líquido y que se le quite el gusto amargo.
- Mientras tanto, usando un pelapapas o mandolina, «afeitar» el calabacín sacando tiras finas. Usualmente lo corto por la mitad y luego rebano cada una, para que los pedazos sean de un tamaño cómodo para comer. No hace falta pelarlos. Poner en el recipiente de servir.
- Una vez que llore la berenjena, secar los pedazos con papel absorbente. Salpicar con un poco de aceite de oliva.
- Poner una sartén o grill a fuego medio-alto y dorar las berenjenas por ambos lados (2-3 minutos por lado debería ser suficiente). Dejar enfriar y pasar al recipiente con el calabacín.
- Otra alternativa es ponerlas sobre una bandeja y dorarlas en el horno precalentado (en broil). En el libro dice que 3 minutos por lado, pero en mi horno hace falta un poco más para que se doren.
- Picar el cilantro e incorporar al recipiente.
- Para hacer la vinagreta, mezclar bien el jugo de naranja y limón con el aceite de oliva, salpimentar al gusto y echar sobre la ensalada antes de servir.
- Recuerden que la berenjena ya va a estar salada. Pruébenla antes de echarle sal al resto.